Rochegrosse se casó con su gran amor Marie Leblond, quien se convirtió en el modelo de las heroínas en sus pinturas durante unos 30 años. La fascinación que ejerció inmediatamente la Dama de Elche todavía aparece en un retrato de su musa, Marie Leblond, titulado «La danseuse», pero que había registrado entre sus proyectos bajo el título explícito de «Femme d’Elche». Publicado en La Dama de Elche, lecturas desde la diversidad, p. 97. Tomado de La Gazette de l’Hotel Drouot nº 37 de 27-10-1989.