Firmada en la parte inferior derecha de la espalda con el nombre del autor «D. Tafalla». Está sin fechar. Datación aproximada, años 40, que corresponde a la etapa más activa de Tafalla como escultor y constructor de hogueras. No se conservan los moldes. Inicialmente, estuvo en el despacho del artista; después, en la casa de su hijo Ricardo Tafalla García y, actualmente, en la de su nieto Ricardo Tafalla Ribes. Es de escayola, reforzada con tela de estopa, imitación piedra. Ricardo Tafalla Ribes recuerda que su padre la pintó en varias ocasiones. La primera hace 30 años. Tiene tres capas de pintura, dos en blanco y la que puede apreciarse en ocre, ennegrecida por el paso del tiempo y el humo del tabaco. Su abuelo le contó que la figura fue realizada a partir de un modelo original al que tuvo acceso tras obtener el permiso oportuno. Probablemente, de la réplica de Ignacio Pinazo Martínez existente en el antiguo Museo Arqueológico de la Diputación de Alicante, entidad con la que mantuvo relación a través de la I Exposición Provincial de Bellas Artes, celebrada en 1944. Desconocemos con qué fin se hizo. No tenemos evidencia de que fuera mostrada públicamente.