En la remodelación de un huerto particular a jardín, a través de la valla se ven dos reproducciones huecas de la Dama de Elche a las que le faltan los rodetes, están sin terminar. La propietaria es la hija del autor, Dña. Manuela Agulló Martínez, su esposo Francisco Uñach es quien, muy amable, me facilita los datos y me permite hacerle fotografías.